¿Qué pasará con los 11 millones de migrantes que esperan la reforma?
La reforma migratoria integral propuesta por Biden otorgaría la posibilidad de acceder a un camino hacia la ciudadanía para los más de 11 millones de migrantes indocumentados que hoy residen en el país. Los republicanos se han opuesto radicalmente a esta propuesta porque, como ya sabemos, la mayor parte de ellos no apoya la idea de migrantes residiendo en el país.
Desde hace varios días las noticias comunican cómo los demócratas estaban dialogando con representantes republicanos y analizando también la posibilidad de enviar el proyecto de ley en pequeños paquetes legislativos. Finalmente se conoció la decisión de posponer la presentación de la ley.
Los demócratas de la Cámara de Representantes han tomado la decisión de posponer la presentación del plan por una reforma migratoria del presidente Biden. La decisión fue tomada luego de haber hecho diferentes análisis y cálculos que evidenciaron la imposibilidad de alcanzar los votos necesarios para la aprobación de la ley.
“Necesitamos realizar algunas consultas con miembros clave y partes interesadas, pero no veo ninguna razón por la que no lo marcaríamos cuando volvamos a reunirnos en abril”.
Afirmó el presidente del Comité Judicial de la Cámara de Representantes, Jerry Nadler.
Steny Hoyer, quien lidera la mayoría de la Cámara de Representantes, comunicó el martes que a mediados de marzo se votarán dos proyectos de ley más pequeños. Uno ofrecería estatus legal a los trabajadores agrícolas que actualmente no tienen permiso del gobierno para hacer su trabajo, y el otro dará lugar a un camino hacia la ciudadanía a personas traídas ilegalmente a los Estados Unidos cuando eran niños, es decir, los Dreamers.
El plan de reforma migratoria integral de Biden ofrecía una amnistía gradual que daría a la mayoría de los migrantes indocumentados la posibilidad de obtener un estatus legal y, en años posteriores finalmente, la ciudadanía.
La propuesta de reforma migratoria integral de Biden exige que a los migrantes indocumentados se les ofrezca un plazo de cinco años de «estatus legal temporal», seguido de tres años con una Green Card, después de lo cual tendrían la posibilidad de solicitar la ciudadanía.
Las temáticas vinculadas a la inmigración han dividido históricamente a los demócratas, y una nueva crisis (o desafío, en términos de Alejandro Mayorkas) a lo largo de la frontera de Estados Unidos con México hace que los cambios sean más difíciles de proponer.
Ya muchos sabíamos que una reforma migratoria integral tendría problemas para ser aprobada en el Senado, donde se necesita una supermayoría de 60 votos para lograr la aprobación.
La Dream Act, que habría dado protección a los jóvenes traídos al país cuando eran niños, murió en una votación de 55 a 41 en el Senado en 2010, cuando cinco demócratas, incluido el actual senador Jon Tester de Montana, votaron en contra. El presidente Barack Obama puso en acción un programa similar mediante una orden ejecutiva en 2012.
¿Qué será de la reforma migratoria integral?
Por lo pronto, les digo que tengamos paciencia, deberemos esperar para la reforma migratoria integral, pero la Cámara votará dos proyectos de ley de migración más pequeños la próxima semana: uno para proteger a los migrantes indocumentados que llegaron a los Estados Unidos cuando eran niños y otro para proteger a los trabajadores agrícolas.
Esto es muy importante porque muchos consideran probable que esta sea la única oportunidad realista que tiene la administración Biden en la actualidad para aprobar la reforma migratoria.
Si bien queremos que la reforma migratoria integral se haga realidad cuanto antes, ahora nos enfocaremos en los dos proyectos de ley que se discutirán la semana próxima. Se trata de la Ley de Promesa y Sueño Americano y Ley de Modernización de la Fuerza Laboral Agrícola.
El primero de ellos permitiría permanecer en el país a los inmigrantes indocumentados que llegaron a los Estados Unidos cuando eran niños (Dreamers), con la propuesta posterior de acceso a un camino a la ciudadanía. Mientras que el segundo daría la posibilidad de obtener la residencia permanente a los trabajadores agrícolas indocumentados.
Los senadores Lindsey Graham y Dick Durbin presentaron el mes pasado una nueva versión de la Dream Act 2021 en el Senado, lo que indica que el proyecto de ley tiene al menos cierto apoyo bipartidista en el Senado.
A su vez, entre los estadounidenses, el apoyo a los Dreamers es bastante generalizado. Tal es así que recientemente diferentes grandes compañías demostraron públicamente su apoyo. Tenemos esperanzas de que estas dos leyes sean aprobadas.
Como siempre les digo, debemos mantener la paciencia y nuestra confianza en Dios.
Esperamos que la semana próxima logren aprobarse estas dos leyes que beneficiarán a miles de personas.
