El condado de San Diego (California) anunció que se declaraba en estado de emergencia por la “crisis humanitaria” que está enfrentando en la frontera de San Diego por el enorme flujo de migrantes que ingresa a diario a la ciudad.
Según las autoridades, esta crisis migratoria afloró debido a la liberación de 8,000 migrantes por parte de la patrulla fronteriza durante las últimas semanas tras haber sido detenidos y procesados en la frontera.
En Inmigrando con Kathia te contamos los detalles de la crisis en San Diego, qué medidas tomará el gobierno de Biden y cuáles son las consecuencias que podrían enfrentar los migrantes.
¿Por qué se declaró estado de emergencia en la frontera de San Diego?
La Junta de Supervisores del Condado de San Diego ha decidido por unanimidad declarar estado de emergencia debido al alto número de migrantes que han llegado a la frontera de San Diego en los últimos días. Tal como dijeron las autoridades, el problema principal es la escasez de recursos disponibles para manejar adecuadamente la situación.
¿Qué dicta el documento de declaración de emergencia?
En el documento que declara un estado de emergencia por la crisis migratoria emitido por el condado de San Diego, los funcionarios solicitan al gobierno federal que se implementen más recursos y fondos federales para administrar mejor el número de migrantes liberados por la patrulla fronteriza y poder desarrollar así una solución definitiva a la crisis humanitaria.
Por otro lado, se solicita desde San Diego que el gobierno federal ofrezca asistencia a los migrantes liberados que deban aplicar a un asilo político defensivo en las cortes de deportación. Esto no es un pedido sencillo si tenemos en cuenta la enorme cantidad de casos de asilo atascados en las interminables listas de espera de inmigración. A esto se le suma el pedido de que no sean transferidos otros casos de asilo al condado desde otras jurisdicciones.
Además, se le solicita al gobierno de Biden que facilite a estos migrantes una conexión con sus patrocinadores, así se evita que sean liberados a su suerte en las calles de San Diego. Por su parte, pidieron enfáticamente a la Oficina de Asuntos de Inmigrantes y Refugiados que colaboren aportando información sobre las necesidades y pedidos de las organizaciones no gubernamentales locales y las comunidades afectadas.
¿Qué pasará con los 8,000 migrantes procesados?
Los 8,000 migrantes que fueron detenidos, procesados y luego liberados por la patrulla fronteriza de San Diego aguardan ahora que sus casos sean definidos por los tribunales de deportación donde serán procesados bajo la regla del Título 8 de la Ley de Inmigración y Nacionalidad (INA) que fue implementada tras el fin del Título 42.
En esa misma audiencia, los migrantes deberán solicitar un asilo político defensivo (es decir, el asilo como una estrategia de defensa frente a la deportación). El problema es que su pedido puede ser denegado y como consecuencia recibirán una orden de deportación, o también puede suceder que debido a las altas demoras en las cortes migratorias, sus casos tarden mucho en ser aprobados o rechazados.
Aquí vemos la importancia de que los estados y condados como San Diego reciban la asistencia federal que están pidiendo al gobierno de Biden. No cuentan con los recursos financieros ni con la mano de obra necesaria para procesar tal cantidad de casos ni mucho menos para asistir a quienes han sido liberados sin rumbo en las ciudades.
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