Un voto de 5-4 rechazó restaurar la política
El pasado jueves, la Corte Suprema de los Estados Unidos rechazó un pedido de la administración Biden de reinstaurar una política del Departamento de Seguridad Nacional (DHS) que establecía una prioridad de deportación para las personas indocumentadas en el país. Te contamos de qué se trata esta medida y qué viene pasando en la esfera judicial.
¿Qué es la prioridad de deportación?
En septiembre del año pasado, la administración Biden implementó una medida de control migratorio destinada a mejorar el funcionamiento de DHS.
Actualmente el país atraviesa una crisis migratoria sin precedentes, existen cientos de miles de personas que no tienen estatus migratorio legal. DHS tiene recursos limitados para regular la migración, y el gobierno estableció una “prioridad de deportación” para que la agencia concentre sus esfuerzos en deportar a las personas que representaran un riesgo para la seguridad pública y/o nacional.
También se instó a que los agentes de DHS actuasen con discreción al momento de evaluar la situación de los no ciudadanos antes de realizar un arresto u ordenar la deportación.
Si bien esta medida no fue un avance en los derechos migrantes, al menos sirvió de resguardo para muchísimas personas que viven y trabajan en los Estados Unidos y que llevan una vida normal, excepto por la falta de papeles.
¿Por qué se discutió la prioridad de deportación en la Corte Suprema?
Aunque la administración presidencial trató de impulsar medidas de su agenda migratoria, buscando mejorar la situación de los migrantes en el país, en numerosos intentos sus esfuerzos se han visto bloqueados en el ámbito judicial a partir de desacuerdos de distintos estados federados.
Ocurrió así con la fatal medida “Quédate en México”, instaurada durante el gobierno del presidente Trump. La administración Biden tuvo que luchar a cada paso para probar que su accionar fue acorde a la ley, hasta que la Corte Suprema le dio la razón. Sin embargo, Quédate en México sigue activa hasta que la Corte Suprema se comunique con las cortes de menor jerarquía donde se trató previamente el tema, y que ellas actúen acorde a lo ordenado por el organismo superior.
Con la prioridad de deportación, aconteció algo similar: la medida ocasionó varias demandas, entre ellas una realizada por los estados de Texas y Lousiana, quienes obtuvieran una victoria en las cortes inferiores.
Cuando el caso llegó a la corte, un juez de Texas – nombrado a su cargo durante la administración Trump – le dio la razón a los estados demandantes, explicando en su veredicto que consideró que la medida de DHS no se había realizado acorde a la ley federal de inmigración. La administración Biden llevó el caso a la Corte de Apelaciones para el Quinto Circuito, pero aquí también se enfrentó a una derrota. Prosiguió entonces a llevar el caso a la Corte Suprema.
¿Qué ocurrió en la Corte Suprema?
El gobierno se enfrentó a una nueva derrota al anunciarse el veredicto de la Corte Suprema. Con un voto de 5-4, la victoria quedó del lado de los demandantes originales, y la prioridad de deportación sigue “desactivada”. Los jueces que votaron a favor de la administración fueron Sonia Sotomayor, Elena Kagan, Amy Coney Barret y la última incorporación a esta corte, la jueza Ketanji Brown Jackson.
Sin embargo, el gobierno tendrá oportunidad de apelar la decisión de la Corte Suprema: ya hay una audiencia programada para la primera semana de diciembre.
Seguiremos reportando esta historia a medida que se desarrollen los acontecimientos. No olviden que en nuestro portal de noticias contamos con las últimas novedades de inmigración en Estados Unidos.
¡Bendiciones!