Historias de inmigrantes inspiradoras: Hoy, Astrid Silva.
Te contamos quién es esta increíble mujer que impulsó el Dream Act y la historia de su familia migrante
Era el año 2017 y tomaba la presidencia de los Estados Unidos el candidato demócrata Donald Trump, tras una intensa campaña electoral anti-inmigración. Por primera vez en la historia, la respuesta al discurso que el novel presidente hizo en su primera sesión conjunta del congreso recibió una respuesta en español por parte de la oposición demócrata.
Astrid Silva, activista DREAMer de Nevada, fue la encargada de leer el discurso con la posición oficial del partido demócrata frente al oficialismo de Trump, en apoyo a las familias de migrantes en todo el país.
La historia de Astrid Silva
Astrid Silva es oriunda de México, pero llegó a los Estados Unidos con tan sólo cinco años de edad. Como tantos otros inmigrantes, su familia vino a nuestro país buscando una mejor vida. Muchos DREAMers como Astrid no han conocido realmente otro hogar que los Estados Unidos, pero por su estatus migratorio no cuentan con los mismos derechos y oportunidades que los ciudadanos y residentes permanentes.
Cuando la abuela de Astrid falleció, la joven no pudo viajar a despedirse de ella justamente por su estatus indocumentado. Este tipo de tragedia es moneda corriente en la comunidad migrante, y una de las facetas más desgarradoras de vivir sin papeles en los Estados Unidos. Sumida en la tristeza, Astrid hizo la única cosa que se le ocurrió en aquél momento: le escribió una carta de su puño y letra al entonces líder de la mayoría del Senado Harry Reid. Y para su sorpresa no sólo recibió una respuesta, sino que pasaría a formar una bella amistad con el congresista demócrata desde el año 2009.
La historia de Astrid pasaría fama nacional como ejemplo de las contribuciones que los migrantes realizan en nuestro país. Dar a conocer su historia fue una decisión que tomó mucho valor: tanto Astrid como sus padres vivían con miedo de una posible deportación debido a su estatus de indocumentados. Pero decidió que revelar su estatus valía la pena si podía ayudar a personas como ella a vivir su vida sin miedo en el país que les vio crecer.
Es así que se volvió una de las principales activistas impulsoras de la Dream Act, el proyecto de ley que busca regularizar la situación de los DREAMers y se involucró activamente en el partido demócrata defendiendo los derechos migrantes.
La importancia de ejemplos visibles como Astrid para la comunidad migrante
Muchas personas tienen muy negativa sobre los migrantes y se dejan guiar por prejuicios y mentiras sobre nuestra comunidad. Pero Astrid es una prueba viviente de que los migrantes tienen mucho para ofrecer a este país. Fue alumna destacada en la escuela y graduada universitaria con varios títulos en Nevada, Estado al que llama hogar.
Hoy en día, Astrid Silva sigue estando muy comprometida con su comunidad: es directora de la organización DREAM BIG NEVADA, que ayuda a migrantes elegibles a conseguir y mantener los beneficios del DACA y ayudar a las familias de estatus mixto a permanecer unidas.
La reforma migratoria, una deuda de nuestro país con los migrantes
En enero del corriente año, la senadora demócrata del Estado de Nevada, Catherine Cortez Masto, introdujo un proyecto de ley de “alivio de inmigración privada” destinado a proteger a César Silva, padre de Astrid, de deportación.
César lleva alrededor de treinta años viviendo en los Estados Unidos. En los años noventa buscó regularizar su estatus para poder brindarle un futuro más estable a su familia, pero fue víctima de un fraude que puso en peligro su permanencia en el país.
César se contactó con un supuesto “notario” que publicó un anuncio en un diario de Las Vegas, publicitando permisos de trabajo y residencia legal en el país. César ignoraba que ese beneficio estaba disponible solamente para personas de Nicaragua y que se trataba de una estafa. Esa jugada sucia por parte de estos abogados fraudulentos le valió caer bajo la lupa de las autoridades migratorias. En el año 2011, fue detenido por oficiales de ICE y descubrió que había sido engañado todos esos años atrás.
El proyecto de ley de alivio de inmigración privado es en este momento lo único que mantiene a César Silva a salvo de la deportación, al menos durante un año mientras la legislación es tratada por el Congreso.
En medio de un panorama político incierto, parece que la medida de la Senadora Cortez Masto es el único recurso para este padre familia, ya que la reforma migratoria se encuentra totalmente trabada en el Congreso tras tres intentos frustrados de convertirla en ley.
La historia de Astrid Silva y su familia nos recuerda que nunca hay que dejar de luchar por nuestros sueños, pero también que es necesario que las personas con el poder de tomar decisiones velen por los intereses de todos los hombres y mujeres que llevan adelante vidas honestas y trabajan duro para contribuir con nuestro bello país, sean migrantes o no. Desde Inmigrando con Kathia dedicamos una oración para todos los DREAMers y las familias migrantes.