Ayudas para inmigrantes en medio de la pandemia por el COVID-19.
La noticia de que el cheque de estimulo económico del gobierno no ayudaría a los inmigrantes indocumentados cayo como una bomba en la comunidad inmigrante. Si bien es cierto trabajamos duro en este país y pagamos impuestos como todo el mundo, el gobierno y los políticos de ambos partidos siguen golpeando a los inmigrantes con medidas inhumanas.
Dejar de lado a los inmigrantes significa dejar de lado a millones de niños norteamericanos que serán discriminados por provenir de padres inmigrantes. Esta discriminación no es solo ilegal sino también inhumana. El hambre de cada uno de esos niños quedará en las conciencias de todos los políticos que no supieron proteger a los niños ciudadanos que hoy no tienen voz pero que mañana mas tarde les cobraran la factura.
Sin embargo no todo está perdido. Si bien es cierto los inmigrantes no pueden acceder al cheque de estímulo económico del gobierno o a los préstamos de protección de planilla de la Administración de Pequeñas Empresas, los inmigrantes no deben tener miedo de solicitar todas las ayudas públicas a las que sus hijos o sus esposos ciudadanos puedan acceder. Además, las ciudades, los estados, las organizaciones sin fines de lucros y las organizaciones privadas están proveyendo diferentes tipos de ayudas en sus comunidades y en muchos casos no están preguntando el estatus legal de los que reciben la ayuda. Si un imigrante puede acceder a cualquier tipo de ayuda donde no le pregunte su número de seguro social, entonces ellos y sus familias deben aprovecharlos.
Una de las grandes preocupaciones de los inmigrantes en estos momentos es el miedo a la «carga pública». Es muy importante decirle a todos nuestros inmigrantes que en estos momentos de pandemia, la carga pública no tiene importancia y no debe ser la razón por la que sus hijos o ellos dejen de comer. Yo estoy convencida de que todas las personas que piensan hacer su trámite migratorio en el futuro podrán arreglar su situación migratoria aun después de haber pedido ayudas públicas para sus hijos en estos tiempos de coronavirus. El haber recibido ayuda en este tiempo no podrá ser usado en contra del inmigrante pues la falta de recursos no fue por culpa del inmigrante sino por una desgraciada pandemia que ataco a todos los habitantes de este país y no discrimino por el color de la piel o el estatus legal.
Por eso, si un inmigrante llega a contraer el coronavirus, el inmigrante no debe tener miedo de acercarse al hospital o centro de servicio médico más cercano. Los exámenes de coronavirus son gratuitos y la atención hospitalaria no le será negada por ser inmigrantes. Gracias a Dios, los médicos tienen como misión principal salvar vidas y en estos momentos esta será la prioridad. No importa si no tiene papeles, no importa si no tiene dinero, el inmigrante debe luchar por su vida sobretodo porque las puertas de los hospitales están abiertas para todos los seres humanos en este país y debemos luchar por nuestras vidas.
En conclusión, si usted es inmigrante, por favor no deje que el miedo lo controle. Saque fuerzas del corazon valiente del inmigrante y mire hacia el futuro con coraje. Aplique a todo lo que puedan aplicar para darle comida y salud a sus hijos y no tenga miedo por la carga pública. Quédese en casa si puede quedarse en casa y si tiene que salir a trabajar tome todas las precauciones necesarias. Esta crisis del coronavirus pasara y no vencerá a la comunidad inmigrante en este país por el contrario la hará más fuerte y resiliente.
Hacia adelante inmigrante…..
Kathia Quiros Pereira